Riesgos del ácido clorhídrico
Riesgos del ácido clorhídrico
A pesar de sus diversos usos, el ácido clorhídrico debe ser utilizado con mucha precaución debido a sus propiedades corrosivas. Es capaz de deshacer tejidos blandos, orgánicos y también plásticos y metales. Es altamente tóxico y siempre se recomienda proteger la piel y mucosas durante su manipulación.
Quemaduras con ácido clorhídrico
El ácido clorhídrico es tratado con precaución por su característica corrosiva, capaz de afectar ojos, piel y membranas de la mucosa. Su contacto directo pudiera provocar graves quemaduras en la piel, y la inhalación de los vapores del ácido clorhidrico, causan una fuerte irritación a nivel de ojos y nariz. La ingesta de este ácido resulta por lo tanto, también completamente nociva para la salud, siendo capaz de causar un daño a nivel tisular a las membranas mucosas que conforman el estómago y el esófago.
Recomendaciones en caso de riesgo
- Al riesgo por inhalación, comienza una corrosión por el tracto respiratorio, bronquitis crónica, edema e irritaciones. Se recomienda sacar a la persona a que respire aire fresco para desintoxicar.
- Al ingerir, se recomienda beber abundante agua o leche para contrarrestar el ácido. Jamás se debe inducir al vómito.
- Al contacto con los ojos, se recomienda lavar con abundante agua durante al menos 15 minutos.
Deficiencia de ácido clorhídrico en el cuerpo
Como bien es sabido, nuestros jugos gástricos tienen entre sus componentes ácido clorhídrico. La deficiencia del mismo pudiera afectar considerablemente nuestra salud provocando:
- Dolores de barriga
- Náuseas
- Aumento en la acidez del estómago y reflujo ácido
- Diabetes
- Desnutrición al no darse la absorción de los nutrientes de los alimentos
- Aumento en el número de bacterias: parásitos de los intestinos, levaduras